Es la suave brisa,
que calma mi alma.
Es la inmensa fortaleza,
que aleja mis miedos.
Es la sonrisa perfecta,
que dibuja alegría a mi vida.
Es el más grande amor,
que llena mi corazón.
Él es…
Es la tormentosa tempestad,
que adiestra a mi alma a ciertas circunstancias.
Es la más bella ola impetuosa,
que clama a mi calma.
Es la majestuosa lluvia,
que me permite conocer tímido cristal.
Es el viento inquietante,
que silencia la noche.
Él es…
Es la joya afiligranada con cariño,
que inspira ternura a mi vida.
Es la resonante mágica melodía,
que transmite brillo a mis días.
Es el dulce acaramelado,
que me embalsa de ternura.
Él es un hombre ejemplar,
Al cual hoy mi corazón elige amar.
R.E.H.E.
27/Junio/2013